Puedo ser feliz, pensando que estás conmigo e imaginar un futuro junto a tí, pero ¿Vale la pena, en realidad, edificar ilusiones de cartón? Ellas hacen que mi vivencia sea solo un sueño, que quiero vivir y nunca voy a poder. Claro que todos nos equivocamos, pero de aquellos errores que una vez cometiste, se aprende y te juras a tí mismo no volver a cometerlos. Aquí va tu juramento en falso. Vuelves a caer en la maldita trampa de la tentación, vuelves a caer en el mismo pozo. Estas harto de sufrir por sueños incumplibles y harto de mendigar apenas un poco de su amor para que luego te traicionen, te hieran, te lastimen. ¿Qué te queda por hacer? Te sentís perdido en un mar sin fondo, queres ahogarte y no podes, parece que el sufrimiento se alarga más y más y tus ganas de vivir se debilitan con el paso de las horas. Pides un deseo, pides ser feliz. Sin embargo, la simpleza de aquel deseo lo hace aún más imposible. Te das cuenta del error cometido y quieres volver atrás, revertir las cosas, retroceder la cinta hasta aquel día en que tu mundo se revolucionó por completo; pero ya es tarde y
--------------------------ahora notas que tu vida cuelga en las manos de la ignorancia ~
No hay comentarios:
Publicar un comentario